Horario
Todos los miércoles
de 17.30 a 20:30
En la sociedad actual se nos invita a vivir de una forma aséptica y que las situaciones complejas e intensas no nos contaminen ni para bien ni para mal.
Pero la vida es inconcebible sin emoción: ser conscientes de que existe, sin negarla, expresarla y vivirla facilita la buena dinámica fetal y tiene repercusiones positivas durante el embarazo, el parto y la crianza.
Al acudir a nosotros realizamos un diagnóstico individual y diferencial del carácter de cada mujer para poder hacer un pronóstico individualizado de su proceso de embarazo, parto y crianza, orientándola adecuadamente.
Durante el embarazo te ayudamos a tomar conciencia, junto a la respiración, de tus miedos, de tus tensiones corporales, de los límites determinados por tu carácter. Porque todas y todos venimos de una historia y, evidentemente, en el embarazo, esa historia está a flor de piel.
En este grupo tomarás conciencia del embarazo como proceso fisiológico y psico-afectivo saludable, considerando el parto como un pasaje, un proceso natural en el ser humano.
El embarazo es una experiencia que la vivís, vosotras, las mujeres y también, vosotros, los hombres. En los grupos animamos a los hombres a que se embaracen, para que puedan vivir y expresar las emociones y sentimientos que les provoca esta nueva situación.
El parto es una experiencia fundamentalmente emocional. Os ayudamos a que seáis activos en vuestro proceso de parto con recursos, y dinámicas de trabajo activas, participativas, y dialogantes… Dinámicas psicocorporales, respiración profunda, relajación, técnicas energéticas y trabajo corporal y verbal. Material audiovisual y dinámicas del grupo.
Todos los miércoles
de 17.30 a 20:30
El trabajo de prevención durante la gestación tiene como objetivo favorecer el embarazo. Se trata de un trabajo que debéis realizar a tres: la madre, el padre y el bebé.
Es algo profundo que implica transformaciones dinámicas energéticas, vivencia de situaciones emocionales como la expresión de la tristeza, la rabia, el llanto, el dolor, la alegría…
Todo ello no afecta negativamente, sino todo lo contrario: facilita la buena dinámica fetal, tanto en el embarazo como en el parto, evitándose así sufrimientos fetales.
Por este motivo un útero expansivo, energético, que pulsa, incide directamente sobre el feto. Es lógico, ¿no? Imaginaros por un momento un útero recogido, espástico. ¿Cómo puede sentirse el embrión en su interior?
Los miedos, las angustias, las situaciones no elaboradas inciden directamente sobre el diafragma del feto porque se nutre física y emocionalmente de nosotras y nosotros.
Si como madre vives todo tu embarazo de una forma consciente puedes aumentar tu capacidad de contacto y relación empática con la criatura que vas a traer al mundo. El parto solo es un pasaje y el primer año debe ser un continuum para tu bebé que nace a la vida, y para toda la familia.
A través del estímulo que proporciona el masaje enérgico de las contracciones uterinas, se produce una acción sobre el sistema nervioso sensitivo y sobre los telerreceptores del bebé, lo que permite que nazca despierto, energetizado y activo, y busque seguir en contacto con su madre a través de la piel, del pecho y del pezón materno.
Todo este proceso, a su vez, desencadena la puesta en marcha de complejos mecanismos hormonales, que agudizan el estado de alerta y acogida de la madre. Muchos bebés buscan los ojos, se miran, se reconocen, se olfatean, se huelen y se sienten como si continuaran en el interior del útero.
A los pocos días del parto, realizamos una visita domiciliaria a todas las parejas que han participado en los grupos de embarazo. En casa, realizamos el masaje Ukitu al bebé para poner en marcha sus funciones, reforzar el vínculo, facilitar un clima de tranquilidad en el ecosistema familiar que asegure las dinámicas para un buen desarrollo de los primeros meses de vida.
En caso necesario, sea por un parto dificultoso, sea por acompañar una situación de fragilidad en los primeros días del recién nacido y de su acople al sistema familiar, también atendemos en el domicilio de las familias de forma personalizada.
Nosotros sí que os orientamos desde el embarazo para que vayáis creando un ambiente adecuado en la etapa posterior al parto y toméis conciencia de las dificultades que pueden aflorar. Porque hoy en día vivimos de forma muy independiente en nuestros hogares y las parejas os enfrentáis a una soledad inmensa.
Muchos de esos problemas suelen derivar del desconocimiento y la falta de comprensión de los ritmos del bebé, lo que lleva a no respetarlos.
Por lo tanto, la clave para solucionar y evitar estas dificultades reside en la construcción de una comunicación y una relación saludable con el bebé basada en la tranquilidad y el respeto de sus propios ritmos.
Damos una gran importancia a que las parejas tengan unos criterios unificados de acompañamiento en la crianza para que cada uno ocupe su lugar, evitando el desgaste y los posibles conflictos entre la pareja.